miércoles, 6 de julio de 2016

¡Pre véngase!
Evitar la enfermedad es muy fácil. Basta con tomar las tres dosis de la vacuna, usar condón en todas las relaciones sexuales y no compartir jeringuillas, agujas o cualquier otro objeto cortante con otras personas. La red pública de salud ofrece preservativos. Si no sabe dónde hay un centro para recoger condones, llame al servicio de información telefónica Disque Saúde: 0800 61 1997
Además, todas las embarazadas han de realizar el seguimiento prenatal y los exámenes para detectar la hepatitis, el sida y la sífilis. Este cuidado es fundamental para evitar la transmisión de la madre al hijo. En caso positivo, es necesario seguir todas las recomendaciones médicas, también sobre el tipo de parto y la necesidad de no amamantar hasta que el niño tome la primera dosis de la vacuna contra este tipo de hepatitis.
Vacuna
Actualmente, el Sistema Único de Salud ofrece la vacuna contra la hepatitis B. Todo el mundo puede y debe tomar la vacuna contra la hepatitis B. Es gratuita y se administra en cualquier centro de salud. La inmunización se realiza en tres dosis, con un intervalo de un mes entre la primera y la segunda dosis y de seis meses entre la primera y la tercera.
Biología
El agente causante de la enfermedad es un virus ADN bicatenario de la familia Hepadnaviridae.

hepatitis b

Causada por el virus B (VHB), la hepatitis del tipo B es una enfermedad infecciosa, también llamada hepatitis sérica. Como el VHB está presente en la sangre, en el esperma y en la leche materna, su transmisión se da a través de las relaciones sexuales sin preservativo con una persona infectada, al compartir jeringuillas, agujas, cuchillas de afeitar, alicates de uña u otros objetos que pinchan o cortan, de una madre infectada al hijo durante la gestación, el parto o la lactancia. Por sus formas de transmisión, la hepatitis B se considera una infección de transmisión sexual.
La mayoría de los casos de hepatitis B no presenta síntomas. No obstante, los más frecuentes son cansancio, mareos, nauseas y vómitos, fiebre, dolor abdominal, piel y ojos amarillentos, orina oscura y heces claras. Esos signos suelen aparecer entre uno y seis meses tras la infección. La hepatitis B puede tener dos formas: aguda y crónica. En la aguda la infección tiene una corta duración. Los profesionales sanitarios consideran que se da la forma crónica cuando la enfermedad dura más de seis meses. Generalmente, la hepatitis aguda deriva hacia la crónica en entre un 5 % y 10 % de los adultos infectados.
El diagnóstico de la hepatitis B se realiza a través de un análisis de sangre específico. En caso de resultado positivo, el médico indicará el tratamiento más adecuado. Además de medicamentos —si fueran necesarios—, se recomienda una dieta de fácil digestión para no sobrecargar el hígado, no consumir bebidas alcohólicas durante un período mínimo de seis meses y tomar medicamentos para aliviar los síntomas, como el vómito y la fiebre. En personas adultas infectadas por el VHB, del 90 % al 95 % se cura; del 5 % al 10 % tienen el virus durante más de seis meses, evolucionando hacia la forma crónica de la enfermedad.

hepatitis

¿Cómo se contagia?

Se conocen muchas, aunque no todas las posibles vías de contagio de la hepatitis C. Algunos pacientes son diagnosticados y no tienen ningún antecedente que justifique el contagio, por lo que se supone que existen vías de infección diferentes de las nombradas, y que no han podido ser demostradas hasta el momento.
  •  en la actualidad es una vía de contagio poco frecuente por los controles a los que se somete a la sangre utilizada para dichas transfusiones. Sin embargo, existen muchos pacientes que contrajeron la enfermedad mediante esta vía cuando no se había descubierto el virus ni había forma de detectarlo (antes de 1990). Existe un periodo denominado 'ventana', desde que te contagias hasta que desarrollas anticuerpos (que es lo que detectan los análisis), en el que se pasaría por alto el diagnóstico de una hepatitis. Para reducir el riesgo, se hace a los pacientes una encuesta sobre factores de riesgo de modo que si existe duda de que haya podido contagiarse, su sangre no se acepta.
  • Compartir jeringuillas: los pacientes adictos a drogas por vía parenteral y las personas que fueron tratadas con inyecciones en la época en la que se usaban jeringuillas no desechables pueden contagiarse de la hepatitis C. En la actualidad, en nuestro país el colectivo de los usuarios de drogas es uno de los más afectados por la enfermedad. El personal sanitario puede contagiarse con un pinchazo accidental.
  • Los tatuajes y ‘piercing’ pueden ser causa de infección si no se usan materiales desechables o no se tienen las medidas higiénicas adecuadas. La persona que hace el ‘piercing’ debe utilizar guantes y lavarse las manos después de cada trabajo.
  • Vía sexual: mantener relaciones sexuales no suele ser una causa frecuente de contagio. Existen algunas relaciones de más riesgo, como son las de carácter homosexual (si existen erosiones anales). También aumenta el riesgo de contagio si la persona afectada o su pareja tienen una enfermedad de transmisión sexual concomitante: la inTransfusiones sanguíneas:fección por VIH aumenta el riesgo de contagio, así como la gonorrea o la infección por clamidia. Durante la menstruación se desaconsejan las relaciones sexuales por la presencia de sangre.
  • Vía materno-fetal: los hijos de las madres afectadas pueden contagiarse. El riesgo de transmisión es del 2% y se incrementa al 4-7% para los hijos de madres con RNA positivo en el momento del parto. También depende, en parte, de que existan otras infecciones asociadas o de lo traumático del parto. Se puede contagiar en cualquier momento del embarazo pero parece más frecuente en el momento del parto.

Recibí tratamiento contra la infección por clamidia. ¿Cuándo puedo tener relaciones sexuales nuevamente?

Usted no debe tener relaciones sexuales de nuevo hasta que usted y su pareja sexual o sus parejas sexuales hayan completado el tratamiento. Si su médico le recetó un medicamento de una sola dosis, deberá esperar siete días después de haberlo tomado, antes de volver a tener relaciones sexuales. Si su médico le recetó un medicamento que debe tomar durante siete días, deberá esperar a terminar todas las dosis antes de tener relaciones sexuales.